Una voz del cielo (7 de septiembre)
“Entonces habló una voz del cielo . . . Al oír la voz, algunos de la multitud pensaron que era un trueno, mientras que otros decían que un ángel le había hablado.” Juan 12:28b-29 NTV
¿Alguna vez pensaste que la vida sería mucho más fácil si Dios simplemente bajara de los cielos y respondiera a todas tus preguntas y dudas en voz audible?
Esa sería una excelente manera de eliminar toda la ambigüedad y la confusión, ¿no?
Bueno, en Juan 12:29, Dios sí habló en voz audible, y aun así la gente no pudo ponerse de acuerdo acerca de lo que acababan de escuchar. Algunos dijeron que había sido un trueno; otros la voz de un ángel.
Esta historia deja en claro que la habilidad de reconocer la voz de Dios es algo que tenemos que desarrollar.
La solución no es una sesión de preguntas y respuestas en vivo con Dios para resolver todas nuestras dudas sino una decisión diaria de estar atentos al “suave susurro” (1 Reyes 19:12) con el que siempre está hablando.
Dios está hablando. ¿Estamos escuchando?
Aplicación
Tomate un tiempo hoy y hacé espacio para escuchar la voz de Dios. En medio de tu día ocupado, quedate en silencio el tiempo suficiente para ser consciente del susurro de Dios.
Oración
Dios, estoy escuchando. En tu nombre; amén.